Con la calma que aportan los buenos resultados, un relajado Caruso Lombardi expresó sus sensaciones, tras el triunfo 2-0 sobre Gimnasia. "Se ganó muy bien. Dominamos gran parte del juego y tuvimos muchas chances de gol. El equipo está en alza, estamos trabajando tranquilos y la locura de los tres primeros partidos ya pasó", aseguró el técnico, quien lamentó los dos puntos perdidos sobre la hora ante Banfield.
Era fundamental este encuentro en la lucha por la permanencia y Caruso lo tenía muy claro. "Les metí en la cabeza a los jugadores que era un partido por el descenso directo, que nos podía dar mucho aire", contó y luego con mesura, más allá de la confianza, agregó que "ojalá más adelante podamos apuntar a otra cosa, pero hoy la prioridad es esta, porque la cantidad de puntos es poca y no nos da el margen para estar un poquito más arriba".
Es indispensable el tiempo para cosechar buenos frutos y en el progresivo trabajo ve el entrenador la explicación de la levantada. "Hay que tener en cuenta que hay muchos jugadores nuevos, que llegaron sobre la hora y se van ensamblando, y el equipo se va haciendo cada vez más fuerte", explicó, aunque está convencido de que el Matador no fue inferior a casi ninguno de sus vencedores. "Con Newell's perdimos bien, pero en los otros partidos no ligamos", se lamentó.
Con la confianza bien arriba, aunque sin despegar los pies del suelo, Caruso Lombardi se prepara para lo que viene. Sabe que Tigre va por buen camino, pero es consciente de que hay un único objetivo: permanecer en la categoría.
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